14 de abril de 2011

La dama

Tus cabellos son de oro

Esa frase, tan recurrida en los institutos para explicar la metáfora, me viene ahora a la cabeza. Y es que hoy voy a hablar de cabellos, pelos, cabelleras, melenas, matas de pelo...

Bueno, de cabellos, pues de entre todos los sinónimos que he encontrado, es el único que me evoca un "oh, bella amada", que está muy relacionado con lo que me trae hoy aquí: una dama. Una joven de la que solo recuerdo el cabello. Había una historia detrás de ella y un escenario a su alrededor, pero solo recuerdo su pelo.

Pasó fugaz por mi mente: la protagonista de una historia de cabello moreno y trenzado. Recuerdo que la trenza era indispensable, algo que la caracterizaba, pero se me escapa el porqué. Y ahora estoy aquí, recordando la larga melena de una dama sin nombre, sin pasado, sin futuro, sin hogar, que ronda mi mente en busca de su identidad.